Sobre vivir de escribir – introducción al blog

Sobre vivir de escribir

¡Hola! Si has llegado aquí es posible que te interese la literatura y estés, como yo, tratando de descubrir si es posible vivir de escribir. Te seré sincera, aún no lo sé muy bien, pero tengo muy buenas sensaciones.

Esta entrada no tiene más intención que introducir este nuevo proyecto que quiero llevar a cabo en los próximos meses. He estado leyendo bastante sobre cómo empezar a escribir un blog, sobre cómo deben ser los post profesionales y cómo debe ser el primero para que tenga un mayor impacto. Pero ¿sabes qué? He decidido que no voy a seguir ninguna guía de internet, porque hoy quiero ser yo misma y ser sincera.

Así que déjame que te cuente un poco quién soy, por qué estoy haciendo esto y qué vas a encontrar aquí en las próximas semanas.

Escribir en tiempos prepandémicos

Soy Laura, o Lau, como me llaman mis amigos. Llevo escribiendo desde que tengo unos doce años (aproximadamente) y desde entonces no he dejado de hacerlo nunca. Disfruto como una enana de ello y es una de mis mayores pasiones, junto a la lectura y a los videojuegos.

2013

En 2013 empecé a compartir mis movidas en Wattpad. Estaba entre muerta de miedo y vergüenza, y eufórica por tener mis primeros lectores y comentarios. La comunidad de Wattpad siempre me acogió entre sus brazos con todo el cariño del mundo y fue entonces cuando me atreví a participar en concursos.

2014-2015

En 2014 y 2015 participé en muchos concursos, de los cuales unos pocos llegaron a ser publicados: tengo dos libros con relatos míos y rulan unos pocos más por ahí que nunca llegué a tener en mis manos.

Después seguí compartiendo en Wattpad. Logré hacer números increíbles (al menos para mí, jeje) en la plataforma y entonces me frustré porque había invertido mucho tiempo y esfuerzo en algo que ahora ya estaba gratis en redes. Había tenido éxito, pero yo no veía ninguna compensación.

2017

Creo que fue en 2017 que fui capaz de acabar mi primera novela larga (larga en plan 60.000 palabras, pero eso es larguísimo para mí, que estoy acostumbrada a los relatos cortos de 5.000 como mucho). La compartí en Wattpad, pero en seguida me arrepentí. Ahora está en borradores.

2018

En 2018 o por ahí, dejé la plataforma. (Pero oju, que mis relatos siguen ahí disponibles, ¡eh!). Cuando hincharon la plataforma con un montón de anuncios, cuando empezaron a crear las historias de pago y cuando dejé de sentirme cómoda compartiendo mi trabajo gratis, lo abandoné.

Entonces tuve una crisis existencial bastante tocha porque llevaba una buena parte de mi vida compartiendo todo lo que escribía y recibiendo feedback. Eso me motivaba un montón para escribir. Cuando dejé la plataforma y quise centrarme en «profesionalizarme» me vi sumida en un vacío bastante grande. Nadie me daba like, nadie comentaba, nadie decía qué le gustaba y qué no. Dejé de saber por dónde tirar o cómo avanzar.

2019

En 2019 no escribí. Estaba centrada en acabar la carrera: tenía más asignaturas de las que podía asumir, además del TFG y las prácticas. Salía de casa como a las 7:30 y llegaba a las 22:00 a casa, como muy pronto (y aún tenía que empezar a hacer los deberes y estudiar). Literalmente no tenía más tiempo. No me daba la vida.

Me gradué. Autopubliqué mi primer relato (cortito, 5.000 palabras o así) en Lektu.

Y entonces llegó 2020 y con él, la pandemia.

2020, el año del apocalipsis

Los primeros meses fueron caóticos. Perdí mi pseudotrabajo y mi primera y única futura posibilidad laboral, porque trabajaba con Asia y ahí empezó todo antes. Busqué desesperadamente un trabajo, porque no podía estar sin estudiar ni trabajar. Cogí lo primero que encontré y me arrepentí a la semana de haber empezado. Lo dejé.

Llegó marzo. Nos confinaron. Aproveché a estudiar un curso de corrección de estilo (en Cálamo y Cran, por cierto, muy recomendado).

Aumentaba mi ansiedad por momentos. Estábamos confinados, estaba estudiando. Y aun así, me sentía tremendamente inútil por no tener trabajo. Seguí buscando cursillos de cosas que hacer desde casa.

Volví a escribir.

Empecé a corregir.

Pasó el verano y nos estaban desconfinando (un poco, al menos). Seguía sin encontrar trabajo, aunque me dedicaba ocho horas al día a tirar currículums. Ni una llamada. Ni una entrevista.

Y entonces llega El Gran Descubrimiento: se puede vivir de escribir

Un día de agosto, mientras mi padre buscaba información para uno de sus proyectos, encontró una página web en la que pagan a gente por escribir. En plan, literal. Me lo comentó y yo pensé que se trataría de un timo o de algo bastante deprimente. Pero estaba tan desesperada que decidí darle una oportunidad.

Me pasé muchos días investigando sobre ello, buscando información, viendo opiniones tanto de gente que paga para comprar contenido como de escritores que cobran por crear contenido. Parecía serio. Un poco preocupante lo poco que cobraba la gente por hora trabajada, pero algo era algo.

Nota: en esos meses en que había estado buscando trabajo me habían hecho ofertas del estilo 500€/mes por 50h/semana (un poco ilegal, ¿no crees?), o de 200€/mes por 24h/semana (sin incluir transporte ni las semanas de preparación ni nada, que tenía que ir de gratis). En cualquiera de los casos, no me salen las cuentas.

Así que sí: no sonaba tan mal, en realidad. Al menos, aunque pagaran poquito (porque pagan poquito), haría algo que me gusta (escribir) desde la comodidad de mi casa (puntos a favor: no salgo en medio de una pandemia ni me gasto el dinero en transporte) y encima ganaría dinero por ello.

La decisión irreversible

En septiembre me apunté a tres sitios de esos (el que había descubierto mi padre y dos extra que encontré investigando). En la última media semana me aceptaron en dos de ellos.

En octubre empecé a trabajar ahí. Y ahora, unos meses más tarde, sigo haciendo esto. Aún no consigo llegar a un salario mínimo (ni de coña, no os creáis), pero creo que estoy mejorando muchísimo y perfeccionando mi técnica. Creo que tal vez en unos meses consiga ganar el equivalente a un salario mensual decente haciendo esto.

¡Así que por eso estoy aquí!

Quiero compartir esto contigo

Sé que hay mucha gente que está en una situación parecida a la mía. Sé que muchos no tenemos trabajo o lo hemos perdido en los últimos meses. Y sé que muchos de los que nos seguimos en redes disfrutamos de la escritura como si fuera nuestra forma de respirar.

Así que he pensado que puedo compartir esto contigo: ¿Qué sitios son? ¿Cómo se usan? ¿Son fiables? ¿Cuánto se gana? ¿Cómo lo hago para apuntarme? ¿Y ahora que estoy dentro, qué?

Quiero recopilar toda la información que fui buscando en septiembre y toda la que he aprendido estos meses a base de trabajar en ello y ayudar todo lo posible para que también podáis convertir esto en vuestro trabajo.

Tengo pensado compartir posts informativos con todo lo que se me vaya ocurriendo. ¿Qué te parece? ¿Suena bien? Si tienes dudas, sugerencias o curiosidades, puedes dejármelas aquí, que intentaré resolverlas todas poco a poco.

Así que nada, ¡bienvenide!

Publicaciones Similares

2 comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *