Reseña: Warcross, de Marie Lu

En Warcross, Marie Lu nos presenta un mundo realista pero ambientado en el futuro. Parece un mundo no muy alejado del nuestro, donde la tecnología está bastante avanzada y facilita la vida cotidiana a las personas.

Cuando la ficción va más allá de la realidad.

Ambientación y contexto

Hideo Tanaka, creador de la nueva realidad virtual

Hideo Tanaka, un joven brillante, ha conseguido crear unas gafas que integran la realidad virtual en el día a día de una forma muy orgánica. ¿Quieres traducir los carteles que lees en la calle? Las gafas lo hacen automáticamente. ¿Quieres entender lo que te dice una persona en otro idioma? Las gafas te ponen subtítulos. ¿Quieres encontrar el camino hacia una determinada posición? No te preocupes, que las gafas te llevarán, pintando sobre la realidad el camino adecuado.

En realidad no suena tan loco. Creo que Google actualmente está trabajando en algo así y pronto ya lo usaremos con tanta normalidad como los móviles. Porque, ¿quién no tiene un teléfono móvil? ¿Verdad?

Tanaka ha integrado esa virtualidad en el mundo real aprovechando la capacidad del cerebro de generar elementos mágicos y fantásticos que nos parecen increíblemente realistas en nuestros sueños: las gafas engañan al cerebro para pintar sobre la realidad y que nos parezca realista, orgánico y genuino.

Warcross, el videojuego por excelencia

Y para que todo el mundo quiera unas y dejen los móviles, se incluyó en las gafas un juego que pronto se hizo lo más popular del planeta: Warcross, un juego virtual donde dos equipos pelean para robarle «el artefacto» a la otra antes de perder la suya propia. El típico artapa la bandera, ¿no?, pero en ambientes fantásticos.

Emika Chen, hacker y cazarrecompensas

La novela sigue las peripecias de Emika Chen, una hacker y cazarrecompensas que vive en Nueva York e intenta hackear la competición inaugural de la final mundial de Warcross. Pero comete un pequeño desliz y acaba haciéndose visible en la partida delante de miles de millones de espectadores. Para su sorpresa, en vez de denunciarla, Hideo Tanaka la invita a participar en los juegos. Al principio Emika no entiende exactamente por qué, tiene miedo de que quiera mandarla a la cárcel o algo peor, pero pronto Hideo le anuncia que trabajará para él como hacker para pillar a alguien mucho peor.

¿En mi opinión?

Una novela para cogerla y no soltarla

Esta ha sido una novela increíble. Me ha enganchado y no he podido soltar el libro hasta acabar. Lo leí en cuestión de pocos días, casi de una sentada, diría yo (al menos la segunda mitad de la novela, ¡no podía soltarla!). Los personajes son carismáticos, misteriosos y con pasados un poco turbios. La tecnología de las gafas, Warcross y cómo se dibuja el mundo a través de las gafas es muy intrigante e increíblemente imaginativo. Me ha encantado meterme de lleno en los espacios y los recovecos que escondía la novela.

Pero ha tenido sus cosillas malas, también

Marie Lu se ha centrado mucho en la construcción de personajes y en los sentimientos (lo cual agradezco infinitamente, porque sin eso no me habría sentido tan atraída a la historia ni tan enganchada), pero ha dejado de lado aspectos importantes de la novela. En ningún momento se ha parado a hacer una explicación del funcionamiento de las finales de Warcross (alrededor de lo que gira toda la novela), así que todo el rato iban sucediendo partidas pero no se entendían demasiado. No sabías exactamente cómo era que se hubiera colado en la inauguración de los juegos y a la vez aún estuviera a tiempo de presentarse para participar, por ejemplo. O, de todas las partidas, ha descrito una y media. El resto se han medio interpretado por las sensaciones después del juego y los personajes comentando las jugadas. Cuando, supuestamente, las partidas son el eje central de la novela (y que por eso lleva ese título, ¿no?).

En conclusión

A lo que quiero llegar es que, aunque la he visto un poco floja en cuanto a algunos aspectos, tiene fortalecidos los que para mí han sido más importantes para que haya podido engancharme y disfrutar absolutamente tantístimo de la novela.

Una novela recomendadísima si te apetece leer sobre misterios, tensión y realidad virtual.

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